martes, 29 de julio de 2008

[Automatic Stop]

Fue extraño.
No podía estar triste por eso. Me lo impedía yo misma.
Pero no me era indiferente, de eso estaba convencida.
Y fue como perder contacto con parte del mundo, como dejar anegada una parte de mi cerebro, temporalmente.

Aunque nadie posiblemente me entienda, hay personas que ayudan más desde su profunda "lejanía" que otras que viven a centímetros de ti.

Debí parecerte ridícula. Yo me vi así.
Pero era tu voz.
Tu voz como me la imaginaba. Se me olvidó decírtelo.

Hiciste lo que yo habría hecho y lo que nadie más que yo conozca hace.

El lazo sigue sobre la mesa.

2 comentarios:

Green Peach dijo...

Y yo qué cara pongo ahora?
Esto es lo último que escribo sobre la red. O espero que mi fuerza de voluntad me lo permita...

Solo puedo decir gracias. Y yo tampoco lo entiendo, se suponía que tenía que la primera llamada en la que tu preguntases "¿quién?" y yo contestase "soy Sara" habría de ser única. Y...ahora que lo pienso, lo ha sido.

Has sido la última persona con la que he hablado, y mi móvil se ha marchado a tierra lejanas... (bueno, a Logroño, pero qué más da)

Tu voz, también como la imaginaba... pero tú, mucho mas... gnial (sin la E, ya sabes... :) ) de lo que imaginaba.


Creo que ya no hace falta ni que te mire a los ojos...

Gracias, Laura, en serio.
Eres maravillosa.


Y... tranquila ^^ en 30 días vuelvo a darte guerra.
Y si apruebo, mucha más :]

rottenclementine dijo...

:)

MedusaBiónica al aparato.
Esperaba que alguien encontrara uno de esos papelitos y lo reconociera como mío. Y así ha sido, qué maravilla.

Dicho ésto me marcho a joder a otra parte. Aaaaaaaah!