jueves, 10 de marzo de 2011

And the sex, and the drugs, and the consecuences.


Más de doscientas fotos guardadas bajo llave en el cajón, todas tus cartas, tu disco y tu camisa azul marino.

Soy todas las palabras que me has dejado decirte, las que me he callado, y las que te voy a gritar.

Las finales están para perderlas, para llevarte la medalla de consolación y arrancártela de un tirón como si fuera la soga con la que te ahorcas un poco más cada día.

La cafetería guarda mi taza llena de silencios en una vitrina junto a las botellas de ron añejo. La canción sigue sonando en tu cabeza, y en la mía retumba tu risa envenenada cuando voy a dormir.

Es ley de vida, la copa la ganaste tú y yo me bebí el resto.

1 comentario:

Rebeca Serrada Pariente dijo...

Has ganado la copa del meado, tú la has cogido y él se la ha bebido JÉ JÉ JÉ
eso es, había que decirlo y estropear la magia de tu entrada jajajaja
Ahorcar a la gente con las medallas que se cuelga es una buena afición ;)
Guardar las cosas que la gente te deja en la cabeza es un buen vicio, pero como todos, acaba pasando factura!

Jumbler ha sido la verificacion de este comentario jajaja